¿CÓMO DEBEMOS LIMPIAR Y CONSERVAR UNAS ALPARGATAS?

Quien no tiene unas zapatillas de esparto! … Raro es encontrar a una mujer que no tenga, mínimo, un par de este calzado en su casa. Y es que igual te las pones con unos vaqueros que con un vestido veraniego largo o corto y quedan genial. Nadie prescinde de ellas y se han convertido en un must have de cualquier fondo de armario.

Pero… ¿Cómo podemos conservarlas y limpiarlas para que parezcan nuevas?

La primera regla es no lavarlas en la lavadora ya que la humedad es un enemigo natural de un elemento tan orgánico como es el esparto, que al final acaba por pudrirse y estropearse. No obstante, se puede limpiar. ¡Manos a la obra!

• Lo primero que vamos a hacer es cepillar bien el exterior con un cepillo suave para eliminar todo el polvo.
• Para limpiar el esparto, espolvoread bicarbonato por toda el área y, tras esperar unos minutos, cepillad bien para eliminarlo. Veréis como la suciedad desaparece casi por arte de magia.
• Para las espadrilles de piel: lo mejor es aplicar una crema incolora y sacarle brillo. Si lleva hebilla simplemente pasarle un paño para quitarle el polvo.
• Para las espadrilles de tela: lo más fácil y eficaz es mezclar un poco de agua con amoniaco o con jabón neutro. Humedecer una esponja o trapo en esta solución y pasarlo suavemente por la tela de las alpargatas sin empaparlas. También para limpiar el interior.
• Para limpiar las manchas de grasa o comida, de nuestras alpargatas, lo mejor es poner un poco de polvos de talco y dejarlo actuar para que absorba la grasa. Después cepillar para eliminar el talco y la suciedad se irá con el cepillado.
• Si hay marcas oscuras en tus alpargatas y tras haberlas limpiado no desaparecen, utiliza una goma de borrar de las de toda la vida de color blanca y empléala directamente sobre la mancha de la zapatilla de esparto.

¡Y por último a secar! Meter unos papeles de periódico en el interior, absorberán la humedad y evitarán que se deformen. Un consejo a tener muy en cuenta, siempre que te dispongas a secar tus zapatillas de esparto no lo hagas exponiéndolas directamente al sol. Simplemente dejándolas al aire libre, pero sin que el sol recaiga directamente en ellas, quedarán perfectas y listas para volver a utilizarlas. También, y no menos importante, intentar guardarlas en una caja, con suficiente espacio para que es esparto no quede aprisionado y, consecuentemente, se deforme.

Como siempre, en Fabiolas queremos hacerte la vida más fácil a través de nuestros consejos útiles sobre limpieza. Ahora no tendrás excusas para lucir tus alpargatas como si del primer día se tratase.